La marihuana y el moho, un problema grave al que cada día se enfrentan muchos cultivadores y que genera bastante preocupación sobre el resultado de la cosecha. Pero no hay prácticamente ningún problema en el cultivo de marihuana que no se pueda resolver con cierta prevención y el tratamiento adecuado. Lo más importante es saber reconocer a tiempo los síntomas de un infección de moho y saber cómo tratarla.
[bctt tweet=»La prevención a la hora de cuidar de tus plantas de #marihuana te ahorrará muchas decepciones» username=»»]
Así que hoy desde Indizono hemos elaborado una práctica y rápida guía con los conocimientos que necesitas para detectar, prevenir y tratar el moho.
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La marihuana y el moho: identificación
Existen muchos tipos de mohos e infecciones que pueden atacar a una planta de marihuana, pero sin duda los más comunes con los que los cultivadores suelen encontrarse son la Botrytis (podredumbre) y el Mildiú Polvoroso. Vamos a analizar cada uno de ellos y los síntomas que los caracterizan para así aprender e reconocerlos y tratarlos a tiempo.
Botrytis (podredumbre)
La Botrytis tiende a establecerse en la base del tallo, por lo que es bastante más difícil de detectar. Habitualmente, el primer síntoma que se manifiesta es un descoloramiento y sequedad de las hojas de las colas. Si se mira más de cerca, se puede observar una pelusilla que crece entre los brotes, y que suele ser de color gris, verde-azulada o blanca. Según las condiciones, esto hará que el brote se seque completamente y se deshaga al tocarlo (baja humedad), o se convierta en una masa descompuesta (humedad alta).
En caso de que la botrytis alcance un estado avanzado, probablemente ya no haya remedio. Aparecerán unas pequeñas manchas negras en el moho que podrían fácilmente propagarse a otras plantas. Ten cuidado en no respirar estas esporas y sobre todo procura asegurarte que no se acerquen a otras plantas. La botrytis también puede atacar a los tallos, las hojas y a la totalidad de las plantas jóvenes, pero este caso es menos común.
¿La solución para una identificación temprana de la botrytis? ¡Revisa tus plantas más a menudo!
Mildiú Polvoroso
El mildiú polvoroso es otro tipo de moho aparece como una fina capa de polvo blanco sobre las hojas de la marihuana, para extenderse por toda la planta. Lo que hace es inhibir la fotosíntesis, y eso provoca que la hojas se marchiten y la planta muera poco a poco por falta de energía. Es difícil de detectar, pero con una observación más atenta se pueden notar unas pequeñas protuberancias sobre las hojas infectadas. Al igual que la Botrytis, el Mildiú polvoroso produce esporas negras en su estado más avanzado y puede infectar otras plantas en el área de cultivo así como ser peligroso por la salud de animales y personas, ya que pueden desarrollarse tanto en interior como en exterior.
También es verdad que ambas enfermedades necesitan que se den un conjunto de circunstancias muy concretas para que puedan infectar a una planta y eso realmente se puede evitar con la prevención, de la que vamos a hablar a continuación.
La marihuana y el moho: prevención
El problema de la marihuana y el moho se puede prevenir para mantener a salvo nuestras plantas. Es mucho más fácil tomar precauciones y vigilar el estado del medio de cultivo que tratar de curar una infección, ya que la mayoría de veces es demasiado tarde.
Hay tres condiciones que pueden provocar tanto la botrytis como el mildiú polvoroso y para prevenir ambas debemos asegurarnos de que ninguna de estas condiciones se dé durante mucho tiempo y, sobre todo, que no se den a la vez:
- Temperaturas frías.
- Aire estancado.
- Condiciones húmedas.
En cultivos de interior, todas estas condiciones que pueden provocar infecciones de moho son bastante fáciles de prevenir. Una temperatura fría es cualquiera por debajo de los 20 grados centígrados. Si tienes un buen sistema de ventilación garantizarás una constante circulación del aire y podrás controlar también la humedad del cuarto de cultivo.
En el exterior, es un poco más complicado. La falta de brisa, las noches frías y la lluvia, pueden contribuir a que el moho se arraigue. Por ello, es muy importante elegir con cuidado el lugar para el cultivo, asegurándose de que haya un buen flujo de aire y que nunca quede exceso de agua en las hojas y brotes.
La marihuana y el moho: tratamiento
Aunque cuesta reconocerlos y nos puede asustar la idea de echar a perder nuestra cosecha, debemos saber que combatir estas enfermedades es muy difícil. Sin embargo, si llegamos a este punto no nos queda otra que intentarlo. Lo que sí está claro es que no siempre merece la pena intentar salvar la planta infectada, ya que curarla completamente y permanentemente será imposible. Lo único que podemos hacer es tratar de mantener la enfermedad a raya mientras crecen las partes sanas. Sin embargo, debemos tener cuidado a la hora de tomar esta decisión, ya que corremos el riesgo de contaminar el resto de la cosecha por una pequeña cantidad de brote que probablemente tampoco sea muy bueno. De hecho, en el exterior las esporas se trasladan de una planta a otra y se reproducen en el suelo como micelio. En el interior, las esporas se depositarán en las paredes, los suelos y prácticamente cualquier superficie hasta que sean eliminadas.
Para la Botrytis, la única opción es utilizar aerosoles biológicos como el Serenade Disease Control. Puede ayudar a tratar la enfermedad y mantenerla a raya hasta la cosecha, pero no la eliminará del todo. También puedes intentar mover las plantas infectadas a un cuarto con una humedad muy baja y así impedir que se expanda. Para el Mildiú Polvoroso hay más remedios posibles: puedes quitar las hojas infectadas y trasladar la planta a una zona cálida y con baja humedad, así como pulverizar la planta con fungicidas especializados para el mildiú. Sin embargo, esta última opción puede influir en la calidad del brote final alterando su sabor, aroma y calidad de humo. También puedes optar por remedios naturales: añade dos cucharadas de vinagre de sidra a 1 litro de agua, y pulveriza las plantas, o prepara una mezcla con un 60% de leche y un 40% de agua y pulveriza las plantas. ¡Intentarlo no cuesta nada!
Para terminar, solo podemos decirte que tú y solo tú eres el dueño de tus decisiones. Pero nuestra recomendación es que si el estado de la enfermedad es avanzado, lo mejor es que elimines o destruyas las plantas infectadas y simplemente aprendas de la experiencia. La prevención es todo, si tienes siempre en mente este aspecto a la hora de cuidar de tus plantas, te ahorrarás muchas decepciones, la marihuana y el moho serán sólo un mal recuerdo y podrás disfrutar al fin de tu buena cosecha que tanto estabas esperando.