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¿Para qué sirve el ozono y por qué es tan bueno para el ser humano? Las capacidades del O3 o trioxígeno son desconocidas para mucha gente, sin embargo, este gas de color azul pálido le permite no sólo actuar para el tratamiento y desinfección de aguas residuales, piscinas y otros recintos, sino también para mejorar la salud de los cultivos, tratamientos medicinales y otros usos industriales.

Cualidades del ozono

El ozono es uno de los agentes oxidantes más potentes conocidos, mucho más fuerte que el oxígeno normal ya que tiene una molécula más del mismo, de ahí que se llame oxígeno enriquecido.

La capacidad de oxidación del O3 permite su uso en aplicaciones industriales y de consumo que tengan que ver con la oxidación. Este mismo alto potencial oxidante, sin embargo, causa que el ozono dañe los tejidos mucosos y respiratorios en los animales, y también los tejidos en las plantas, por encima de las concentraciones de alrededor de 100 ppb.

Pero esto no es lo normal, ya que las máquinas y dispositivos generadores de ozono controlan los niveles para que el ser humano no tenga problemas al respirar este gas.

De hecho, un punto muy beneficioso del ozono para el ser humano es la protección que ejerce sobre los rayos del sol. Esto es posible gracias a la capa de ozono que tiene una concentración mayor de O3 en torno a los 2 a 8 ppm y que evita que la luz ultravioleta dañina llegue a la superficie del planeta.

Una de las cualidades del ozono es la aplicación en medicina. De hecho, este gas ya se usó en la Primera Guerra Mundial, en concreto, en el Hospital Militar Queen Alexandra en Londres para desinfectar las heridas de los soldados. En la actualidad, existe una técnica medicinal llamada ozonoterapia que usa el gas para tratamiento médico y curación de algunas enfermedades.

En el caso de la ozonoterapia, el ozono es usado para mejorar la función celular humana, para luchar contra agresiones externas e incluso detectar células mutágenas.

En el ser humano el ozono tiene un efecto muy positivo ya que su aplicación ayuda entre otras cosas a incrementar las defensas de nuestro cuerpo. Además, y gracias a su alto poder antioxidante actúa directamente sobre la sangre y estimula la producción de glóbulos blancos lo que reduce la aparición de enfermedades.

Es capaz de mantener la limpieza en entornos donde es necesario tener altos estándares de limpieza, como los quirófanos, gracias a su capacidad de eliminar cualquier agente o partícula externa presente en el aire.

Aplicaciones del ozono y usos industriales

1. Cosecha y secado de cultivos.
2. Como desinfectante, fungicida, bactericida y desodorante.
3. Para el enriquecimiento de CO2.
4. Limpieza de agua sanitaria y desinfección de aguas fecales.
5. Usos en plantaciones de todo tipo (invernaderos y cultivos indoor).
6. Eliminación de olores en locales de hostelería.
7. Para agricultura ecológica y tradicional.

¿Cómo se origina el ozono?

La presencia de un olor penetrante distintivo es una característica de este gas. En principio el ozono se origina de forma natural en la atmósfera, en concreto, en la troposfera. El ozono se forma a partir del dioxígeno por la acción de la luz ultravioleta y las descargas eléctricas dentro de la atmósfera.

Además, también está presente en concentraciones muy bajas en las capas bajas del cielo. Lo bueno para el ser humano, es que el llamado ozono malo está en la estratosfera donde cuenta con su mayor concentración en esta capa de ozono, que absorbe la mayor parte de la radiación ultravioleta proveniente del sol.

El ozono presente en la estratosfera, se produce principalmente a partir de rayos ultravioleta de onda corta que rondan los 240 y 160 nm.

Así, el oxígeno comienza a absorberse débilmente a 240 nm en las bandas de Herzberg, pero la mayor parte del oxígeno se disocia por absorción en las fuertes bandas de Schumann-Runge entre 200 y 160 nm donde el ozono no es capaz de absorber dicha radiación.

Tanto el ozono bueno (troposfera), como el malo (estratosfera) es creado de forma natural. Sin embargo, el hombre ha sido capaz de generar este gas de forma artificial. Una forma de producción de este gas es a partir del oxígeno en el ánodo de una celda electroquímica.

Esta reacción puede crear cantidades más pequeñas de ozono que se usan generalmente para estudios y fines de investigación.

Efectos de la aplicación del ozono

El ozono enriquecido es muy efectivo a la hora de matar toda clase de virus, bacterias y protozoos si se genera en el momento. Como no necesita un tratamiento especial ni requiere de almacenamiento de materiales peligrosos se puede usar en cualquier lugar e instalación.

Lo bueno es que a medida que desinfecta, oxida las impurezas inorgánicas y orgánicas, al igual que otros minerales como el manganeso o el hierro. Se debe tener en cuenta que también oxidará los sulfuros que pueden ayudar en la filtración.

Como es un oxidante hasta un 50 %  más fuerte que el cloro, requiere un tiempo de contacto mucho menor para eliminar compuestos inorgánicos y orgánicos que otros métodos más clásicos.

La ozonificación es un proceso de infusión de agua con ozono que se puede utilizar en acuicultura para facilitar la descomposición orgánica. Además, este gas también se añade a los sistemas de recirculación para reducir los niveles de nitrito mediante la conversión en nitrato.

Finalmente, también se puede usar para la extracción de algunos metales pesados del suelo ya que es capaz de trabajar con compuestos de coordinación fuertes, solubles en agua con algunos metales pesados (Pb, Zn), lo que permite su disolución a partir de suelos contaminados. Antes de esto se trata el suelo con ozono para mejorar la eficacia de extracción de los metales pesados.

En definitiva, el ozono es uno de los mejores aliados para el ser humano a la hora de desinfectar y realizar tratamientos que tengan que ver con la oxidación. Y es que sus usos y aplicaciones se incrementan más cada día.

¿Quieres conocer más sobre el mundo del ozono y los ozonificadores? ¡Entonces no dejes de leer nuestro blog!